Este puente, que ancla sus cimientos a ambos lados del barranco del Fornocal, se construyó para poner en comunicación las localidades de Asque y Colungo. Su espectacular emplazamiento nos hace pensar en el riesgo y la dificultad que llevo aparejada su construcción, y por ello, algunas leyendas la atribuyen al mismo diablo. Sin embargo otras, explican que su denominación "Puente del Diablo" se debe al hecho de que éste se debió pasear por allí, dejando su huella sobre el mortero aún fresco, nada más finalizarse la construcción. Aquella huella no correspondía a un perro, ni a un jabalí, ni a un ciervo... Debió ser del mismo diablo... Pero ¿salió de Colungo para ir a Asque o de Asque para ir a Colungo?

Con toda probabilidad, se trata de una obra de origen medieval. El tablero es plano, de casi 3 m de anchura, y se apoya sobre un arco ojival levando con pequeñas dovelas de buena factura. El resto de la obra es de mampostería. El arco apuntado es un añadido, ya que en su interior quedan restos de otro arco, de medio punto, más antiguo.

La inusitada distancia del pretil con respecto al arco se explica por el hecho de que los paramentos fueran recrecidos en numerosas ocasiones.

En las paredes de conglomerados calcáreos del barranco pueden verse en primavera los espectaculares tallos floridos de hasta 60 cm. de la Corona de rey Saxifraga longifolia, que pueden llegar a contener más de 500 flores. La roseta basal de hojas de las que surge este tallo muere tras la floración.

 

  • Asque. Puente del diablo 2
  • Asque. Puente del diablo